Kion, sabores asiáticos en manos peruanas en Copilco
Un sábado cualquiera, después de un par de vueltas por Copilco y con la panza haciendo más ruido que el metro en hora pico, me di cuenta de que no había comido nada. Ya me estaba resignando a caerle a algún local de mala muerte de los que abundan por la zona —esos que siempre huelen rico, pero uno nunca sabe si es sazón o suerte—, cuando decidí caminar tantito más por Avenida Copilco para ver si el café que me gusta seguía abierto.

Pero justo cuando iba en plan “solo voy por un cafecito”, vi un letrero que me detuvo en seco: Kion, sabores asiáticos en manos peruanas. ¿Qué era esto? ¿Comida chifa? ¿Nikkei? ¿Un ceviche con soya? Mi estómago curioso dijo vamos, y entré.
El lugar no es de esos que te impresionan con luces neón ni muebles de diseñador; más bien parecía una ex pizzería o fondita de barrio, pero con onda. El aroma a leña calentita flotaba en el aire, lo justo para que se te antojara todo sin salir oliendo a fogata. Al ver el menú confirmé mis sospechas: ¡chifa! Esa mezcla sabrosa entre cocina china y peruana que nació gracias a la migración china a Perú allá por el siglo XIX. Lo mismo pasó en Mexicali, por si se lo estaban preguntando. El menú tenía de todo: chaufa, tallarines, wanta, siu cao… un festival de nombres exóticos y antojos intensos.

Pero confieso que, al principio, los precios me parecieron medio pasados para la zona. Así que activé mi modo estudiantil nivel experto y me puse a buscar promociones. Ahí fue cuando encontré los paquetes especiales, con pollo a la leña y chaufa. Pedí el paquete 4, que traía ensalada, medio pollo , papas fritas y arroz chaufa.
Y aquí viene lo bueno: cuando me trajeron la comida, pensé que se habían equivocado de pedido. ¡Era un montonal! Fácil comían dos… o tres si uno anda a dieta (no era el caso). Me explicaron que los precios eran porque las porciones estaban pensadas para compartir. Así que no, no era caro, ¡era tremenda ganga!

¿La comida? Rica, bien servida y con ese sabor casero que te abraza el alma. No diré que fue una experiencia gourmet de estrella Michelin ni que me sentí en un episodio de MasterChef Perú, pero sí salí más que feliz, y con comida para llevar. Todo por menos de $250 pesitos. Un milagro en tiempos inflacionarios.
Así que ya sabes: si andas por Copilco, con hambre y espíritu aventurero, lánzate a Kion. Buen sabor, porciones generosas y una mezcla cultural que te lleva de Lima a Pekín en un solo bocado. Y sí, es de esos lugares que puedes recomendar con confianza cuando te preguntan por algo bueno, bonito y barato.
¿De a cómo, de a cuánto?
Dirección: Medicina #74-66, Copilco Universidad, Ciudad de México, CDMX
Horario: Lunes a domingo de 12:30 a 21:00 hrs.
Costo por persona: Menos de $250 pesos
Página web: kioninternacional.com